Édouard Boubat fue un fotógrafo francés que viajó por medio mundo
buscando imágenes cotidianas y naturales que le han convertido en uno de
los mejores representantes de la fotografía humanista francesa. Entre
todos los viajes que realizó tuvo tiempo de pasar algunas temporadas en
España y, también, en Salamanca.
buscando imágenes cotidianas y naturales que le han convertido en uno de
los mejores representantes de la fotografía humanista francesa. Entre
todos los viajes que realizó tuvo tiempo de pasar algunas temporadas en
España y, también, en Salamanca.
En Juzbado tenemos la suerte de
recibirle a finales de la década de los 50 cuando, acompañado del
profesor Luis Cortés y Madame Paulette Gabaudan, fotografió nuestro
pueblo durante alguna ocasión posiblemente al final del verano.
Desconocemos qué ha sido del conjunto de fotografías que hizo, ni
siquiera sabemos qué cámara utilizó en ese viaje. Lo que sí hemos
podido averiguar, rastreando la red, es que existen algunas imágenes
dispersas de Juzbado y de sus vecinos publicadas en varios repositorios y
agencias de fotografías extranjeras.
recibirle a finales de la década de los 50 cuando, acompañado del
profesor Luis Cortés y Madame Paulette Gabaudan, fotografió nuestro
pueblo durante alguna ocasión posiblemente al final del verano.
Desconocemos qué ha sido del conjunto de fotografías que hizo, ni
siquiera sabemos qué cámara utilizó en ese viaje. Lo que sí hemos
podido averiguar, rastreando la red, es que existen algunas imágenes
dispersas de Juzbado y de sus vecinos publicadas en varios repositorios y
agencias de fotografías extranjeras.
En esta ocasión os mostramos una
de las instantáneas más emocionantes. Hay más. El Señor Aurelio sujeta
una vara sobre el hombro mientras camina tras un carro con enormes
ruedas (aún se conservan) usado para llevar piedras. Al fondo a la
izquierda se observa el cementerio, el paraje conocido como Las Lamedas
donde sobresalen algunos árboles y un palomar allá en lo alto del
Cotorro, hoy desafortunadamente en ruinas. Todo un testimonio histórico
y, sobre todo, un homenaje a la vida en los pueblos de hace más de 60
años.
de las instantáneas más emocionantes. Hay más. El Señor Aurelio sujeta
una vara sobre el hombro mientras camina tras un carro con enormes
ruedas (aún se conservan) usado para llevar piedras. Al fondo a la
izquierda se observa el cementerio, el paraje conocido como Las Lamedas
donde sobresalen algunos árboles y un palomar allá en lo alto del
Cotorro, hoy desafortunadamente en ruinas. Todo un testimonio histórico
y, sobre todo, un homenaje a la vida en los pueblos de hace más de 60
años.
Desde aquí agradecemos a todos los vecinos que han contribuido a
recordar y a hacer memoria aportando datos sobre cada una de las
fotografías que hemos recuperado.
recordar y a hacer memoria aportando datos sobre cada una de las
fotografías que hemos recuperado.
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| Fuente: https://www.gettyimages.es/editorial-images |